Tras su victoria, Donald Trump se convertirá en el primer delincuente convicto en llegar a la presidencia de Estados Unidos.
En una contienda electoral intensa y decisiva, Donald Trump aseguró su regreso a la Casa Blanca tras obtener una victoria contundente en varios estados clave y reunir más de 68 millones de votos, equivalente al 51 por ciento de los votos totales.
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La victoria de Trump sobre la demócrata Kamala Harris, quien obtuvo 63 millones de votos (47 por ciento), reflejó un apoyo consolidado en zonas rurales y suburbanas, donde su retórica sobre seguridad y economía resonó con fuerza.
Con esta victoria, Trump no solo vuelve a la Casa Blanca, sino que lo hace con más poder que en su primer mandato, al contar con el control republicano de ambas cámaras del Congreso.
El partido republicano logró retomar el control del Senado por primera vez en cuatro años, asegurando 52 escaños frente a los 42 de los demócratas.
En la Cámara de Representantes, los republicanos se perfilaban para obtener la mayoría, con 198 escaños de los 218 necesarios, superando a los 180 de los demócratas. Este respaldo legislativo promete un periodo de gobierno con menos barreras para implementar su agenda.
En un discurso la noche anterior en su cuartel de campaña en West Palm Beach, Florida, Trump, acompañado de su esposa Melania y su compañero de fórmula JD Vance, se comprometió a “sanar a Estados Unidos” y “arreglar nuestras fronteras” en referencia a la migración desde México.
“Lucharé por ustedes cada día, lograremos un país próspero. Esta será la era dorada de Estados Unidos, es una victoria magnífica para el pueblo, que nos permitirá hacer a Estados Unidos grande otra vez”, declaró ante sus simpatizantes.
10 claves que explican el triunfo de Donald Trump en EU
- Dominio en los estados clave.
- El triunfo de Trump en estados bisagra como Carolina del Norte, Georgia y Pensilvania fue decisivo, inclinando la balanza electoral a su favor y asegurándole una mayoría suficiente en el Colegio Electoral. La sorpresa fue aún mayor al ganar también en Wisconsin, Michigan, Nevada y Arizona, territorios donde el voto suele dividirse y resulta crucial para determinar el desenlace electoral.
- Apoyo masivo del electorado.
- El resultado de estas elecciones demuestra un apoyo masivo y sólido a Trump, especialmente en áreas rurales y suburbanas, donde su estilo directo y enfoque en temas como seguridad y economía resonaron con fuerza, conectando profundamente con su núcleo de votantes.
- Discurso directo y crudo.
- La campaña de Trump estuvo marcada por un discurso franco y, en ocasiones, polémico. Este estilo, calificado por algunos como “crudo”, permitió al exmandatario conectar con una base de votantes de derecha.
- Creciente apoyo en la población latina.
- Sorprendentemente, Trump logró captar el voto de una significativa porción de latinos, incluso a pesar de su discurso duro sobre la inmigración. Comunidades latinas de estados como Florida y Texas vieron en su enfoque de seguridad fronteriza una medida necesaria, lo cual reforzó su apoyo. Sin embargo, este respaldo estuvo salpicado por rumores infundados, como la falsa versión de que migrantes haitianos consumían mascotas en Ohio, una narrativa que fue ampliamente criticada.
- Mensaje claro sobre seguridad en las fronteras.
- Una de las piedras angulares de su campaña fue la insistencia en reforzar la seguridad fronteriza. Trump señaló repetidamente que las fronteras de Estados Unidos son “permeables” y urgió la necesidad de implementar medidas estrictas.
- Resistencia a las advertencias en su contra.
- A lo largo de la campaña, opositores y analistas advirtieron en diversas ocasiones que un nuevo mandato de Trump podría derivar en un estilo de gobierno “autoritario”. Sin embargo, estas advertencias no lograron el impacto esperado; el electorado las desestimó y prefirió concentrarse en cuestiones más inmediatas, como la economía y la seguridad, temas de mayor relevancia en su vida cotidiana.
- La inflación como tema decisivo.
- La economía y el impacto de la inflación en la vida diaria de los estadounidenses fueron determinantes en la elección. Trump prometió una economía estable y criticó la gestión de la inflación bajo el gobierno demócrata, pese a los números macroeconómicos robustos.
- Apoyo unificado.
- La victoria de Trump también se vio respaldada por un Partido Republicano unificado. Aunque hubo disidencias internas, estas no representaron un riesgo significativo.
- Control del Senado.
- El control del Senado por parte de los republicanos asegurará una presidencia con menos obstáculos para implementar sus políticas. Esta situación permitirá a Trump avanzar en su agenda con mayor libertad, en un Congreso que podría enfrentar divisiones.
- Más gobernadores.
- El partido republicano también logró un avance territorial significativo, al obtener gobernaciones en Vermont, New Hampshire, Virginia Occidental, Indiana, Misuri, Utah, Dakota del Norte y Montana. En total, el partido de Trump ahora controla 27 de las gobernaciones, consolidando su presencia en la mayoría de los estados y fortaleciendo su influencia política a nivel nacional.