Tal como lo prometió durante campaña, el presidente Donald Trump señaló que las deportaciones masivas iniciarán lo antes posible.
Este martes 21 de enero aumentó la tensión en Estados Unidos tras la toma de protesta de Donald Trump. Hace unas cuantas horas los medios de comunicación nacionales e internacionales comenzaron a difundir que el mandatario ordenó redadas contra migrantes.
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De acuerdo con las autoridades estadounidenses, las redadas de migración en comenzarán en lugares previamente considerados como “protegidos” por ejemplo: escuelas, iglesias y hospitales. La noticia ha desatado incertidumbre en muchas partes del mundo.
Trump comienza a aplicar primeras acciones contra migrantes
A través de un comunicado de prensa, Benjamine Huffman, secretario interino de Seguridad Nacional, anunció el fin de lineamientos establecidos durante la administración de Joe Biden que impedían la aplicación de redadas en lugares “sensibles”.
“Esta acción empodera a los valientes hombres y mujeres del CBP (la Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza) y del ICE (Servicio de Inmigración y Aduanas) para aplicar nuestras leyes migratorias y atrapar criminales -incluyendo asesinos y violadores- que han ingresado ilegalmente a nuestro país”.
En el mismo mensaje señaló:
“Los criminales ya no podrán esconderse en las escuelas e iglesias de Estados Unidos para evitar ser arrestados. La Administración Trump no atará las manos de nuestras valientes fuerzas del orden, y en su lugar confía en que usen el sentido común”.
Detenciones de migrantes en Estados Unidos
De acuerdo con las leyes de 2011, los agentes estadounideses no tenían permitido hacer detenciones en escuelas, iglesias o albergues. Ante la nueva medida de Trump, diversos actividas señalaron que hacer este tipo de operaciones en escuelas no solo generaría miedo sino que también podría en riesgo a los niños.
Por su parte, Benjamine Huffman dijo que se pondrá fin a lo que el catalogó como “abuso” del parole humanitario y regresar el programa a la revisión caso por caso. El parole permitía a ciertos migrantes vivir y trabajar temporalmente en Estados Unidos.
Al final de comunicado se puede leer lo siguiente:
“La administración Biden-Harris abusó del programa de libertad condicional humanitaria para permitir indiscriminadamente la entrada en nuestro país de 1.5 millones de inmigrantes. Todo esto se detuvo el primer día de la administración Trump. Esta acción devolverá el programa de libertad condicional humanitaria a su propósito original de examinar a los migrantes casos por caso”.
