Silvano Aureoles vivía en un búnker con muros y ventanas con blindaje antibalas, pasadizos secretos y también lujosas amenidades.
El exgobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, se encuentra en el centro de la controversia tras la revelación de una orden de aprehensión en su contra por presuntos actos de corrupción y enriquecimiento ilícito con recursos públicos.
Durante su administración, Aureoles vivió en una lujosa residencia oficial que incluía un búnker personal de 120 metros cuadrados, equipado con un helipuerto, áreas verdes, espacios recreativos y lujosos interiores. El búnker contaba con muros y ventanas blindadas, así como un pasadizo secreto para salir, oculto detrás de un mueble de madera.
Además, la residencia tenía piscina, jacuzzi, sauna, tinas de hidromasaje, canchas de tenis y basquetbol. Tras estas revelaciones, el actual gobernador, Alfredo Ramírez Bedolla, decidió no habitar la residencia oficial y transformarla en la Casa Michoacán, un espacio dedicado a la cultura estatal.
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Autor: Edward E. López
