El PRI atraviesa una de sus crisis más duras “por culpa de Alito Moreno” quién se rehusó a dejar la dirigencia del partido.
Desde que Alito Moreno asumió la dirigencia del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en agosto de 2019, el partido ha experimentado una significativa pérdida de poder a nivel estatal.
Bajo su liderazgo, el PRI ha perdido once gubernaturas, reduciendo su presencia a solo dos estados: Durango y Coahuila. Esta debacle ha sido atribuida a la creciente influencia de Morena y a la incapacidad del partido tricolor para adaptarse a las nuevas dinámicas políticas del país.
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Autor: Edward E. López
