Varias organizaciones del PJF pidieron la intervención de algunas de las instancias internacionales que siempre velan por los intereses de EU.
A pocos días de que entre en funciones la nueva legislatura en el Congreso, y con ello se discuta la reforma judicial, distintas organizaciones del PJF recurrieron a instancias internacionales para intentar frenar lo propuesto por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
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Se trata de la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación (Jufed), así como del grupo de trabajo Guardianes de la Constitución y el colectivo Circuitos Unidos Trabajadores de Poder Judicial de la Federación, quienes solicitaron la intervención y algunas medidas cautelares para evitar que el llamado Plan C se apruebe.
Tal información fue dada a conocer por medio de un comunicado de prensa que circuló en redes sociales, en donde las organizaciones del PJF aseveraron que la reforma judicial provocará daños sumamente graves e irreparables para la independencia de este Poder.
Parte del comunicado dicta:
“Este esfuerzo colectivo debe ser interpretado como la intención abierta de entablar un diálogo productivo con las autoridades del Poder Ejecutivo Nacional que permita la revisión amplia de la propuesta y su adecuación a los derechos e intereses en juego, además de las exigencias internacionales vigentes”.
Organizaciones del Poder Judicial piden ayuda a la CIDH y la OEA
Respecto a las instancias internacionales a las que recurrieron las organizaciones del PJF, se tiene que el comunicado se dirigió a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y a la propia Organización de los Estados Americanos (OEA), comandada por Luis Leonardo Almagro Lemes, un personaje sumamente criticado por el propio López Obrador.
Hasta el momento en que se suscribe este artículo, las instancias internacionales no han emitido respuesta alguna; sin embargo, se espera que al menos la OEA sí lo haga, ya que dicha organización suele inmiscuirse en distintos asuntos relacionados con la política de las naciones americanas, pero siempre favoreciendo a los intereses de los Estados Unidos.
Prueba de lo anterior es que gracias a la OEA se han avalado golpes de Estado, tal como sucedió en Bolivia hace algunos años, así como también se han palomeado el tener injerencia en elecciones, como estuvo a punto de suceder en el pasado ejercicio federal que se llevó a cabo en Venezuela, mismo que no se concretó porque faltó un voto a favor.
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Portada: El Político
Autor: Irving Sánchez/@irvingsannz