El peso mexicano continúa dando pasos pequeños hacia adelante; no obstante, estos ya son muy constantes, por lo que se sigue apreciando.
Desde que comenzó el año 2023, el peso mexicano no ha dejado de crecer, por lo que al cierre del mes de enero, este se apreció un 3.4 por ciento, situación que no se vivía desde hace cinco años, es decir, poco antes del presente sexenio.
Y es que, según los datos del Banco de México (Banxico), la divisa nacional se posicionó como la séptima moneda emergente que más avance ha tenido en lo que va del año con respecto al dólar americano.
Esta situación se puede explicar por el diferencial que hay en las tasas que México tiene respecto a Estados Unidos, así como la alta liquidez y el grado de inversión que existe con una perspectiva estable de cara al futuro próximo.
Con dicha apreciación, el peso mexicano quedó en un nivel de 18.83 unidades por dólar, teniendo un máximo y un mínimo de 19.47 y 18.68 unidades por dólar, respectivamente.
James Salazar, subdirector de análisis económico de CI Banco, explicó lo siguiente:
“El rally positivo se justifica en términos generales por la expectativa de los operadores de que la Fed en Estados Unidos pronto haga una pausa en el alza de tasas de interés e incluso podría recortarlas a finales de año. Las cifras de inflación a la baja y una economía fuerte han propiciado estas apuestas”.
El peso continuará avanzando en los próximos meses
Por si todo lo anterior no fuera suficiente, el peso mexicano podría crecer aún más durante los próximos seis meses, es decir, al menos esta tendencia se mantendría hasta el mes de julio de 2023.
Se espera que la moneda nacional se mueva en un rango de entre 18.60 y 19.10 unidades por dólar americano. Posteriormente, los datos económicos podrán mostrar un poco de desaceleración.
Es así que en la segunda mitad del año se verá si México se mantendrá en crecimiento o al final de todo terminará por caer y se presentará una nueva recesión.
El propio James Salazar refutó:
“Básicamente en la segunda mitad de año empezará el tema de observar los datos económicos para ver si se cumplen las expectativas de recesión y un asunto de rendimientos reales que se hacen menos favorables para el caso de México, pues reduce los incentivos para tener activos denominados en pesos, lo que juegan en contra del peso, con lo que se ubicaría por arriba de los 20 pesos”.
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Portada: El Político
Autor: Irving Sánchez/@irvingsannz
