Murillo Karam fue imputado por la supuesta tortura a El Cepillo, presunto sicario de Guerreros Unidos relacionado con el caso Ayotzinapa.
Este lunes, la Fiscalía General de la República (FGR) imputó al exprocurador Jesús Murillo Karam por las presuntas torturas a Felipe Rodríguez Salgado, alias El Cepillo.
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Como seguramente recordarlas, durante la administración de Enrique Peña Nieto, Rodríguez Salgado fue señalado responsable de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa. Además, se dijo que era presunto sicario de Guerreros Unidos.
Este asunto está relacionado con un video difundido en julio de 2020. En el material audiovisual aparece Tomás Zerón de Lucio, extitular de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), participando en un interrogatorio ilegal.
Además se muestra a El Cepillo sin camisa y con el rostro cubierto declarar bajo amenazas y sin asistencia legal, testimonio que no fue incorporado al expediente del caso.
La audiencia inicial se llevó a cabo este lunes a puerta cerrada en el Reclusorio Sur y fue presidida por el juez Felipe de Jesús Delgadillo Padierna. De acuerdo con la información difundida hasta el momento, tendrá continuación el próximo 21 de abril.
FGR imputa nuevos delitos a Jesús Murillo Karam
Tras la audiencia, la FGR señaló a Jesús Murillo Karam por su presunta responsabilidad en diversos delitos. Entre ellos figuran delitos como desaparición forzada de personas, tortura y coalición de servidores públicos.
Hasta el momento, el juzgador no se ha pronunciado sobre la medida cautelar a imponer al exprocurador. Esto se debe a que se encuentra bajo prisión preventiva justificada por otra causa penal.
Ahora bien, la situación jurídica del exfuncionario se resolverá hasta el próximo 21 de abril. Ese día se celebrará la continuación de la audiencia inicial.
Cabe mencionar que en 2022, el juez de control del Centro de Justicia Penal Federal en el reclusorio Norte, Marco Antonio Fuerte Tapia, vinculó a proceso a Murillo Karam por su probable responsabilidad en delitos de tortura, desaparición forzada de personas y contra la administración de la justicia, derivados del caso Ayotzinapa, lo que resultó en la desaparición de 43 normalistas.
En aquella ocasión, la FGR imputó al exprocurador de ‘fraguar’ la denominada ‘verdad histórica’, y que supuestamente de forma premeditada, ordenó alterar y manipular evidencias y desviar líneas de investigación, contribuyendo a ocultar el paradero de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Además, los fiscales aseguraron que Murillo Karam organizó un ‘cónclave’ donde participaron funcionarios estatales y federales de la pasada administración.
