Con la Ley de Amparo, los jueces ya no podrán otorgar suspensiones provisionales o definitivas a leyes y reformas aprobadas en el Poder Legislativo.
Con 69 votos a favor y 42 en contra, los integrantes del Senado de la República aprobaron reformas a la Ley de Amparo, para impedir que jueces y magistrados puedan suspender normas y obras públicas.
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Se trata de una serie de modificaciones a los artículos 129 y 148 de la Ley de Amparo. Aunque continuará el derecho al amparo, los legisladores de oposición señalaron que es una medida con la que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador “blindará” la realización de obras.
Así como el establecimiento de reformas en la Constitución, aunque estas tengan presuntas irregularidades. Es decir, la reforma a la Ley de Amparo consiste en quitarle a los jueces la facultad de suspender leyes de manera provisional y definitiva que hayan sido impugnadas a través de la Ley de Amparo.
Oposición critica reforma a Ley de Amparo
Tras la aprobación de las reformas a la Ley de Amparo, senadores de oposición aseguraron que dicha medida era una supuesta venganza del presidente López Obrador a los juzgadores.
Pues quienes a través del encuentro de ‘irregularidades’ no han permitido el paso de reformas constitucionales como la electoral planteada en 2022 y el ‘plan B’ de la misma planteado en febrero del año pasado.
Recordemos que la iniciativa fue presentada por Ricardo Monreal, coordinador de la bancada de Morena. En argumento señaló que el objetivo es que el Poder Judicial respete lo acordado en el Legislativo.
Por lo tanto, se está buscando que las reformas votadas en la Cámara de Diputados y la Cámara de Senadores no se limite mediante juicios de amparo. Debido a que por estas resoluciones del Poder Judicial se han suspendido tramos del Tren Maya, así como algunas otras obras y leyes debido a irregularidades.
Finalmente, el senador Emilio Álvarez Icaza, uno de los principales opositores a la reforma, dijo que se trataba de una reforma regresiva. Asimismo, señaló que supuestamente se quiere “desaparecer” al Poder Judicial en los hechos.
Así como desaparecer uno de los pocos recursos que tiene la ciudadanía ante el abuso de poder. Finalmente, Olga Sánchez Cordero señaló que no esta reforma no se están afectando los derechos:
“Ni por supuesto que estamos haciendo una regresión en las garantías y en la promoción de derechos y desde luego tampoco violentamos el principio de constitucionalidad”.
Cabe mencionar que esta minuta fue turnada a la Cámara de Diputados para su análisis y aprobación.